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Conocida por su destacada arquitectura, la cultura maya se da a conocer en todo el mundo. Chichén Itzá es un gran ejemplo de ingeniería compleja y estructuras muy bien estudiadas. Aprende más sobre cómo la Astronomía y la Arquitectura Maya se unen maravillosamente. Cuanto más aprendamos sobre ellos, más podremos disfrutar cuando visitemos los sitios arqueológicos.
Durante siglos, los arqueólogos y otros científicos han estudiado la Cultura Maya y su arquitectura. Cada día hay algún nuevo descubrimiento sobre las matemáticas y la astronomía que hay detrás de las construcciones de los mayas. La arquitectura ha sido un tema clave para saber más sobre los mayas y sus estudios, pero la gente sigue preguntándose cómo lograron aprender tanto sobre el universo y aplicarlo realmente a la función y el diseño de sus edificios. Primero, aprendamos un poco de la arquitectura maya:
Chaac es el dios maya al que se le atribuye estar asociado con la lluvia, el trueno, el rayo y la provisión de agua. Básicamente, era el dios al que acudían en busca de prosperidad para sus tierras cuando llegaban las épocas de cosecha y siembra. Chaac se representa habitualmente en muchos edificios y artefactos que se hacían como ofrendas a él. Se le representa como un anciano con un rostro joven con una peculiar nariz en forma de gancho. Muchas máscaras de Chaac se encuentran como decoración de muchos edificios prehispánicos con arquitectura de estilo Puuc, que se encuentra principalmente en la Península de Yucatán.
También conocida como "arco falso", esta pieza arquitectónica es muy representativa del estilo Puuc. Se utilizaba principalmente para resaltar el acceso principal de los edificios. Con la maya, el arco vino junto con la bóveda maya, que se hace juntando arcos prefabricados. Al estar las piezas una al lado de la otra, creando este camino, se hacen más altas, añadiendo altura al edificio.
Al igual que el Observatorio o El Caracol de Chichén Itzá, los edificios redondos y ovalados fueron hechos con un propósito específico. La mayoría de los edificios ovalados se utilizaban como santuarios u observatorios y también estaban decorados con máscaras de Chaac en la fachada.
Otro gran ejemplo de esta particularidad son las casas mayas. Si alguna vez has oído hablar de ellas o has visto una, te darás cuenta inmediatamente de la forma ovalada de estas casas. Tienen esta forma por una razón, y es por los fuertes vientos y huracanes. Ayuda a que los vientos no choquen sino que fluyan rodeando las casas. ¿No es asombroso que los mayas se ocuparan de todo y lo pusieran en práctica?
Si se presta atención a los edificios mayas, se notará un patrón hecho por calados escalonados. Se puede encontrar en fachadas, artefactos y textiles. Muchos creen que está inspirado en las serpientes o en el movimiento del viento. El calado escalonado se encuentra no sólo en la cultura maya, sino en muchas otras culturas mesoamericanas.
Las orientaciones de los edificios cívicos y ceremoniales eran astronómicamente funcionales, principal o exclusivamente en dirección este-oeste. Los estudios han encontrado que es muy probable que algunos de ellos estuvieran alineados con el movimiento de Venus o de la Luna, o incluso con algunas estrellas. Aun así, es más común encontrar edificios mayas relacionados con la salida y puesta del sol en determinadas fechas.
Los histogramas que elaboramos a muestran que la distribución de estas fechas en el año no es uniforme, sino que manifiesta concentraciones particularmente pronunciadas en cuatro épocas, que con mucha probabilidad pueden explicarse en términos del ciclo agrícola, ya que corresponden a la preparación de los campos de cultivo, el inicio de la temporada de lluvias y de la siembra del maíz, y el momento de la cosecha.
El hecho de que las fechas de salida del sol caigan predominantemente en otoño e invierno y las de puesta del sol en primavera y verano, se debe a la desviación predominante de las alineaciones en el sentido de las agujas del reloj con respecto a los puntos cardinales (sur de este o, visto de otra manera, norte u oeste), una tendencia muy común en Mesoamérica, cuyos orígenes hay que buscarlos en la simbología relacionada con las direcciones del universo. Por otra parte, al analizar la distribución de las orientaciones solares, los científicos detectan que las fechas marcadas por un determinado edificio en el horizonte este u oeste tienden a estar separadas por intervalos que son múltiplos de 13 o 20 días.
La astronomía maya se basaba en la observación. Analizaban el recorrido de cada cuerpo celeste y cómo interactuaban y afectaban a la Tierra. Debido a todo su estudio, se construyeron o conservaron muchas ciudades y cenotes alineados con los cielos y sus estrellas como una forma de seguir estudiándolos.
Los arqueólogos han encontrado documentos perdidos en diferentes partes de Europa sobre los estudios del Sol, la Luna, los planetas y la Vía Láctea que pertenecían al pueblo maya. Ahora se llaman Códices y se conservan en diferentes ciudades del mundo. El Códice contiene información valiosa que me ha ayudado a entender y apreciar el diseño de la Arquitectura Maya.
El Equinoccio y el Solsticio son famosos por ser ampliamente estudiados por la Cultura Maya. Un ejemplo de esto es el Códice Dresden encontrado en Alemania. Este Códice tenía información sobre el Equinoccio, las fases de la luna y los fenómenos relacionados con el sol. En definitiva, hay más cosas que nos sorprenden de las que ya conocemos.
Fuente: Astronomía en la arquitectura de Chichén Itzá: una reevaluación | Estudios de Cultura Maya